Yago Abilleira se ha dedicado por voluntad propia, a la divulgación de la arqueología submarina

IVÁN CALDERÓN

Foto: PEPA LOSADA

Foto: PEPA LOSADA

Al hablar de una de las mayores autoridades sobre la batalla de Rande y la arqueología submarina en Galicia, seguramente pensemos en alguien más parecido a un general prusiano, bigote rizado incluido, o a un joven e intrépido Indiana Jones. Pues la realidad es que uno de estos expertos se aleja radicalmente de ambos clichés. Yago Abilleira destaca por una amplia trayectoria que rivaliza con sus 34 años. El joven contable pontevedrés se ha ganado a pulso un espacio entre los conocedores de la historia submarina, gracias a suincansable protección y promoción del patrimonio histórico, separando siempre la realidad, de la rica mitología que rodea a los tesoros hundidos.

Aunque siempre sintió cierta fascinación por la historia naval,sería en 2002 cuando un curso de la Universidade de Vigo sobre el tercer centenario de la batalla de Rande lo acercaría a lo que se convertiría en su gran pasión: la exploración submarina.

«Mostraron fotos de barcos hundidos y pensé, yo tengo que estar ahí».

Así relata Yago el momento en que quedó prendado. Tanto fue así que se puso en contacto con el instructor de buceo de una de las ponencias y tres meses más tarde ya se estaba sacando el título de submarinista.

Una cosa llevó a otra, y en poco tiempo ya estaba dando sus primeros pasos en la arqueología submarina. Asegura que ese primer grupo de buceo contaba con gente con un amplio conocimiento, tanto de la historia como de la arqueología, lo que constituyó un entorno perfecto para dar rienda suelta a su afición.

Entre las expediciones que más lo marcaron está la que llevó al descubrimiento del submarino de Ons. Relata que, aunque sabían de boca de los pescadores de la zona dónde se encontraban los restos, los hallaron al final de la inmersión, casi por casualidad. «Se han escrito libros sobre tíos que encuentran submarinos y aquí estoy yo, fue increíble». Así describe la sensación de formar parte del grupo que descubrió la tumba submarina del sumergible mas letal de la Guerra Civil, el submarino General Mola.

Además de un experimentado submarinista, es autor de múltiples libros y artículos dedicados a difundir el extenso patrimonio histórico que descansa en el fondo marino de Galicia, así cómo a denunciar aquellas acciones que lo amenazan. A pesar de la creencia extendida de que lo importante de la arqueología subacuática se reduce a explorar el fondo marino y rescatar tesoros, gran parte de la labor se centra en el estudio de la documentación histórica y, sobre todo, en la catalogación de todos esos restos, que de otra forma quedarían olvidados en un almacén.

Este trabajo ha llevado a este joven pontevedrés a colaborar en numerosas ocasiones con el Museo de Pontevedra, en las labores de catalogación, y a formar parte de la Real Liga Naval Española, que en el 2014 le otorgó la medalla al Mérito Cultural por su labor en la difusión del patrimonio sumergido. Siendo no solo el primer pontevedrés en recibirla, sino también el galardonado más joven en la historia de la institución.

Dar a conocer el inmenso patrimonio que posee Galicia no es la única cruzada que ha emprendido. Está convencido de que las practicas de los cazatesoros no solo han perjudicado gravemente infinidad de hallazgos,sino que han popularizado la idea de que lo único que tiene valor del fondo marino son los metales preciosos. Concepción que está dedicado a erradicar, en favor de un mejor futuro para el patrimonio histórico nacional. Futuro con el que no es muy optimista.

 

Fuente :  http://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/pontevedra/2016/08/05/reflotando-historia-naval-galicia/0003_201608P5C12997.htm 5 de agosto de 2016